COMO COMER LAS FRUTAS

COMO COMER LAS FRUTAS

La forma mejor de comer las frutas es crudas, si es posible con la piel. Muchas de las vitaminas desaparecen cuando las cocinamos o están en cantidades superiores en la piel. Desafortunadamente, dada la gran cantidad de pesticidas que se utilizan en su cultivo, es prácticamente imposible comerla sin correr el riesgo de ingerir toxinas, aún limpiándolas bien. Por este motivo

, intentaremos comer aquellas frutas que proceden de cultivos biológicos y que no han sido tratados con estos productos tan nocivos para el organismo. En caso contrario, es mejor pelar bien todas las frutas.

Durante la compra, es habitual que compremos aquellos frutos que presentan mejor aspecto, grandes, con piel lisa y sin ninguna marca en la piel. Muchas veces este aspecto inmaculado no indica que la fruta en cuestión sea mejor. La falta de marcas es muchas veces un síntoma de que aquella fruta ha sido tratada con muchos pesticidas, de manera que los animales que podrían haberlas probado han muerto antes. Otras veces estos productos son sometidos a un proceso de lavado y abrillantado para incitar al consumidor a su compra. Una manzana, por ejemplo, que presente pequeñas marcas en la piel causadas por animales, no será de menor calidad que aquella que presente un aspecto inmejorable. Muchas veces estas pequeñas marcas nos demuestran que la manzana en cuestión no ha sido tratada con pesticidas y, por lo tanto, es mejor para nuestro organismo que aquella que resulta tan atractiva a la vista. Cuando hablamos de marcas en la piel no nos referimos a podredumbres o mohosidades sino a pequeñas puntos, como los que producen los pájaros en ciertas frutas.

Por otra parte, hay que considerar que la fruta no tratada con plaguicidas puede producir mohos, algunos de los cuales son muy nocivos para la salud, especialmente aquellos que afectan a los frutos secos. Por lo tanto, deberemos ser muy prudentes en la fruta que compramos, evitando aquella que presente mohos, podredumbres.. etc.

Sería conveniente, siempre que sea posible, comprar las frutas directamente al productor. Desafortunadamente la mayoría de la fruta hoy en día se recoge verde, de manera que, hasta que llega al consumidor, pasa un buen tiempo, que es el que permite la maduración. Esto hace que la fruta no tenga todo el sabor que debería tener y, sobre todo, que las propiedades dietéticas sean menores. Por ejemplo, los betacarotenos - precursores de la vitamina A - necesitan de la maduración en el árbol para poder desarrollarse, parte de la vitamina C se descompone con el tiempo, etc.

Las frutas pueden comerse frescas o secas. La fruta puede comerse entera o en forma de zumos. Los zumos resultan muy interesantes tanto por su sabor cuando se hacen las combinaciones adecuadas como por su utilidad. Resultan extremadamente refrescantes en verano y constituyen una forma fácil y rápida de ingerir todas las propiedades de la fruta durante todo el año. . Así, por ejemplo, es conveniente tomar un buen vaso de zumo de naranja cuando desayunamos, aunque puede resultar aun más interesante la combinación de frutas con otras hortalizas o con leche, siempre y cuando sean compatibles. Tenemos que tener en cuenta que muchas de las vitaminas de los zumos se oxidan en contacto con el aire, por lo que los zumos de frutas deben elaborarse poco antes de beberselos y no deben guardarse mucho tiempo preparados. El cuadro siguiente muestra alguna de las combinaciones posibles:

Posibles combinaciones de zumos de frutas con hortalizas . (Se puede sustituir la leche por yogur)

Manzanas - naranjas - zanahorias - limones

Leche - manzana - melón - fresas

Leche- piña- coco

Leche - plátano - naranja - piña

Naranja - limón

Naranja - limón - zanahoria

Zanahorias - melocotón - naranjas

Manzanas - zanahorias

Leche - coco - chirimoya

Fuente: http://www.botanical-online.com/lasfrutascomer.htm